GALERÍA: Fiestas Aracelitanas 2019. Un río de devoción por las calles de Lucena

procesiónaraceli2019 (9)
procesiónaraceli2019 (12)
procesiónaraceli2019 (13)
procesiónaraceli2019 (14)
procesiónaraceli2019 (27)
procesiónaraceli2019 (28)
procesiónaraceli2019 (29)
procesiónaraceli2019 (37)
procesiónaraceli2019 (38)
procesiónaraceli2019 (49)
procesiónaraceli2019 (50)
procesiónaraceli2019 (51)
procesiónaraceli2019 (66)
procesiónaraceli2019 (68)
procesiónaraceli2019 (69)
procesiónaraceli2019 (71)
procesiónaraceli2019 (72)
procesiónaraceli2019 (73)
procesiónaraceli2019 (64)
procesiónaraceli2019 (67)
procesiónaraceli2019 (74)
procesiónaraceli2019 (84)
procesiónaraceli2019 (75)
procesiónaraceli2019 (79)
procesiónaraceli2019 (80)
procesiónaraceli2019 (81)
procesiónaraceli2019 (82)
procesiónaraceli2019 (87)
procesiónaraceli2019 (85)
procesiónaraceli2019 (86)
procesiónaraceli2019 (88)
procesiónaraceli2019 (89)
procesiónaraceli2019 (90)
procesiónaraceli2019 (93)
procesiónaraceli2019 (94)
procesiónaraceli2019 (95)

Un año más se cumplió la tradición. Araceli repartió amor maternal por las calles de Lucena y recogió el cariño y la devoción de un pueblo que la quiere, convirtiendo la ciudad en el popular “velón de mil corazones” encendidos de amor por la “Madre Dulce y buena”.

A las ocho de la tarde asomaba al cancel de la portada de la iglesia de San Mateo la Virgen, vestida con la saya y manto en sedas de colores sobre terciopelo rosa estrenados en 2012 con motivo del 450 Aniversario de su venida a Lucena y realizado por Mariano Martín Santonja a partir de los bordados de un antiguo manto, muy deteriorado, regalado en 1955 por la Corporación Municipal.

La cuadrilla de santeros mandada por Jerónimo Jiménez tuvo el honor de santear a la Patrona de Lucena y del Campo Andaluz, que paseó por su itinerario habitual recogiendo el fervor de los lucentinos, expresado también en forma de miles de pétalos de flores cayendo desde los balcones y de fandangos aracelitanos.

Acompañaron a la Patrona de Lucena la Aracelitana Mayor –Elvira Cruces– y su corte de honor, Agrupación de Cofradías y cofradías filiales; la corporación municipal bajo mazas; representantes de la Policía Local, Guardia Civil y Cuerpo Nacional de Policía; del Colegio de Abogados y los Juzgados de la ciudad; clero y un sinfín de mantillas, fieles y promesas, alumbrando con sus velas y haciendo interminable el cortejo procesional.

Antes de entrar en el templo, se apagaban las luces de la Plaza Nueva y la Virgen se aproximaba a San Mateo, mientras empezaban a iluminar el cielo lucentino miles de cohetes, en una magnífica sinfonía de pólvora, humo, color y música, en un renovado alarde pirotécnico de treinta minutos de duración que incluyó composiciones musicales aracelitanas y otras ajenas a la tradición local, para cerrar una noche mágica de devoción aracelitana.

Les dejamos una amplia selección de fotografías realizadas por nuestro colabordor gráfico Jesús Cañete.