LUCENA

Los institutos de Lucena se suman a la campaña de la Diputación de Córdoba contra la trata de personas

La campaña La trata es violación. No formes parte de la trata ha recalado hoy en Lucena
photo_camera La campaña 'La trata es violación. No formes parte de la trata', en Lucena

La Diputación de Córdoba ha trasladado a Lucena la campaña "La trata es violación. No formes parte de la trata", dirigida al alumnado de 4º ESO de los institutos cordobeses, que tiene como objetivo dar a conocer la realidad sobre la trata de seres humanos con fines de explotación sexual y aumentar la conciencia en la población de los municipios de la provincia sobre la grave vulneración de derechos que supone, así como prevenir su existencia.

La concejala de concejala de Igualdad y Diversidad y diputada provincial, Irene Aguilera, ha recordado que, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se estima que 4,8 millones de personas son víctimas de la explotación sexual forzosa en el mundo, el 99% mujeres y niñas, siendo precisamente nuestra comunidad autónoma uno de los principales puntos de tránsito y destino de trata de personas siendo las principales víctimas mujeres entre 18 a 25 años provenientes de países como Rumanía, Nigeria, China y Bulgaria.

Además, Aguilera destacaba que según las últimas estadísticas publicadas por Save the Children, 7 de cada 10 adolescentes consumen pornografía y sitúan la media de edad a los 12 años.

La campaña la realiza la Diputación a través de la asociación Nuevo Hogar Betania, que lleva a cabo una ruta con paradas de sensibilización en cada localidad. En Lucena la campaña llegará a los institutos Sierra de Aras, Clara Campoamor y Juan de Aréjula.

Una furgoneta intenta recrear el ambiente de un club de prostitución con luces de neones y oscuridad, exponiendo en sus paredes testimonios escritos de víctimas de explotación sexual acogidas por Nuevo Hogar Betania, datos y noticias relacionadas con la trata, con el objetivo de que quienes la visitan pueden acercarse al sufrimiento que pasan miles de mujeres a diario y conocen las condiciones en las que se encuentran, según ha expuesto Mar Carreño, educadora social.