La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, y el alcalde de Priego de Córdoba, Juan Ramón Valdivia, han visitado el resultado de las obras ya finalizadas para la eliminación de un tramo de concentración de accidentes detectado en varios cruces peligrosos de la carretera A-339, que une Cabra con Alcalá la Real.
Las obras han supuesto un coste de 2,4 millones de euros y, como ha indicado Rocío Díaz, "vienen a solucionar, con una intervención de calado, los problemas históricos de siniestralidad que arrastraba la carretera no sólo por la confección de sus cruces, sino por el aumento de tráfico que soporta la vía por la no transformación en autovía de la N-432 que une Badajoz con Granada por Córdoba".Esta intervención ha comprendido una remodelación integral de estos accesos y un refuerzo del firme en "una carretera que ha recuperado su seguridad vial tras años en los que se había convertido en un punto negro de la red viaria", según Díaz.
La consejera y el alcalde de Priego han estado acompañados en esta visita por el director general de Infraestructuras Viarias de la Consejería de Fomento, Alfonso Lujano; y la delegada territorial en Córdoba de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Cristina Casanueva, así como representantes de la UTE encargada de los trabajos, formada por Mebisa y Aroan.
CARACTERÍSTICAS DE LA OBRA
La actuación en la carretera A-339 se ha concentrado en los tramos situados entre los kilómetros 22,5 y 24,3 y los kilómetros 26,3 y 28,3, todos ellos en término municipal de Priego de Córdoba, donde se identificaron cinco cruces calificados como tramos de concentración de accidentes. En cada cruce se han aplicado soluciones adecuadas a sus circunstancias.
La consejera ha recalcado que la obra de mayor complejidad se ha efectuado en el cruce existente en el kilómetro 24,3, que ha pasado de ser una intersección en forma de T desde la que se accede a la carretera de Zagrilla a un enlace a distinto nivel para eliminar los giros peligrosos a la izquierda.
Para ello, se ha construido un paso superior en el acceso con un puente con una calzada de diez metros de anchura de plataforma. De igual forma, se han colocado cuatro vigas prefabricadas en doble T, con una luz de 25 metros y 33 toneladas de peso cada una. Además, se ha construido una glorieta para canalizar los movimientos de entrada y salida.
También se ha remodelado el enlace existente en el kilómetro 27 con la construcción de un nuevo carril central de espera en la incorporación desde la A-339 hacia la A-333; eliminando el tramo de trenzado existente y un giro peligroso a la derecha. Además, se ha construido un carril de aceleración y un muro de contención para la incorporación desde la carretera A-333.
El proyecto también ha incorporado carriles de aceleración y desaceleración, hasta ahora inexistente, en las intersecciones situadas en los puntos kilométricos 27,3 y 28,3, mejorando así las incorporaciones a la A-339 y el abandono de la carretera hacia Priego de Córdoba.
Por último, en el caso del cruce de acceso hacia el manantial de la Milana, en el punto kilométrico 23,3, se ha efectuado un refuerzo de firme para mejorar las condiciones de regularidad y adherencia del pavimento, ademas de reponer la señalización horizontal. La actuación se ha completado con el refuerzo del firme en los cuatro tramos de la variante de la A-339 a su paso por Priego de Córdoba.
