El ayuntamiento de Lucena destinará 448.221 euros a la puesta en valor como recurso turístico del conjunto alfarero romano de Los Tejares. La actuación, cuya licitación será aprobada esta misma semana por la Junta de Gobierno Local, incluye la mejora de los accesos al yacimiento arqueológico, la creación de una galería lateral que permitiría observar el conjunto de hornos y la construcción de dos edificios laterales, que albergarán una sala polivalente y un punto de información sobre esta factoría alfarera única en su género en la Hispania romana, así como aseos y almacén, según ha explicado esta mañana la edil Teresa Alonso, responsable del programa EDUSI Lucena Cohesionada en el que se incluye esta actuación sobre el patrimonio local.
Según Alonso, la actuación afectará a una superficie aproximada de 600 metros cuadrados y también contempla la iluminación general del recinto mediante un sistema de placas solares. Además, esta prevista la incorporación del horno romano que fue encontrado en las obras de la variante norte de Lucena hace unos meses.
La edil socialista ha indicado que la previsión es que este recinto pueda estar abierto al público en el plazo aproximado de un año, incluido el periodo de licitación y posterior ejecución de los trabajos.
Alonso ha indicado que el proyecto no incluye la realización de nuevas excavaciones en la zona, "que se deben plantear a más largo plazo" pese a la evidencia de que aún resta por excavar una parte sustancial del yacimiento.
Por su parte, el alcalde de Lucena, Juan Pérez, ha manifestado que el programa EDUSI "Lucena Cohesionada" va a permitir ir definiendo la Lucena de la próxima década y un modelo de ciudad eficiente, sostenible, atenta a los barrios y turística".
Según el regidor lucentino con la puesta en valor de este yacimiento "ampliamos y enriquecemos la secuencia histórica de la ciudad de cara al turismo con la recuperación de nuestro pasado romano".El Alfar Romano de Los Tejares se caracteriza por ser la factoría de cerámica mayor y mejor conservada de la Península Ibérica. El yacimiento, datado entre los siglos I y II a.C., esta compuesto por siete hornos de distinto tamaño y en diferentes estados de conservación, alguno de ellos restaurado en su integridad,
Los restos aparecieron en 1996 durante los trabajos de vaciado de los terrenos destinados para las piscinas de la estación depuradora. Posteriormente se paralizaron las obras para realizar una excavación arqueológica de urgencia. Gracias al interés municipal, este yacimiento no fue destruido.
Desde el 2001 se inició un proceso que culminó en 2004 con la restauración completa de la batería de hornos. Numerosas han sido las investigaciones arqueológicas realizadas en los últimos años en esta lugar que data de los siglos I y II a.C.
